|
||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||
Tweet | ||||||||||||||||||
|
|
||||||||||||
. |
||||||||||||
. |
. |
||||||||||||||
|
||||||||||||||
Guerra fría y |
||||||||||||||
El enfrentamiento entre la Unión Soviética y las
potencias occidentales, Estados Unidos, Reino
Unido y Francia, se había iniciado en 1917 con el
triunfo de la revolución bolchevique. La agresión
de las potencias del
Eje en
1941 posibilitó una alianza efímera entre países
con sistemas políticos y económicos radicalmente
distintos y enfrentados.
La Gran
Alianza consiguió
derrotar a los fascismos europeos y el
expansionismo japonés, pero empezó a
resquebrajarse antes incluso de que las tropas
aliadas ocuparan Berlín. Dos años más tarde, los
aliados habían roto.
|
||||||||||||||
El mundo se divide
en bloques: 1945-1955
El año 1946 fue escenario de una creciente
desconfianza entre los vencedores. Por un lado, el
fin de la guerra mundial había desencadenado en
Grecia y China, sendas guerras civiles donde se
enfrentaban pro-comunistas y pro-occidentales; por
otro, la creciente tensión entre soviéticos y
norteamericanos se reflejaba en las comunicaciones
diplomáticas: ambas potencias se acusaban
mutuamente de pretender dominar el mundo. |
||||||||||||||
Las grandes tensiones
1948-1955
La antigua capital del Reich estaba situada en el
corazón de la zona de ocupación soviética y había
sido dividida en cuatro sectores asignados a cada
una de las cuatro potencias vencedoras: EEUU, Gran
Bretaña, Francia y la URSS. Berlín se convirtió
rápidamente en el punto clave de la guerra fría.
La reacción occidental sorprendió a Moscú. Un
enorme puente aéreo consiguió abastecer a la
población sitiada. Stalin había
subestimado las posibilidades del transporte aéreo
y la resolución occidental a hacerle frente.
Finalmente, el 12 de mayo de 1949 los soviéticos
levantaron el bloqueo de la ciudad.
En Asia, la derrota del imperialismo japonés había
dejado una situación de gran inestabilidad. China
y Corea fueron los grandes escenarios de
enfrentamiento.
La guerra
de Corea tiene
sus orígenes en el reparto en dos zonas de
ocupación de este antiguo protectorado nipón tras
la derrota japonesa en 1945. Corea del Norte, una
dictadura comunista pro-soviética bajo la mano de
hierro de Kim
il Sung, y Corea del
Sur, una dictadura de derechas pro-norteamericana
bajo la dirección de Syngman Rhee. Cuando las
potencias ocupantes se retiraron en 1948-1949, dos
estados antagónicos quedaron frente a frente.
|
||||||||||||||
El Mundo Bipolar
1948-1955 La partición de Alemania y la guerra de Corea mostraron al mundo una nueva realidad: la división en dos grandes bloques liderados por EEUU y la URSS. En adelante, cada bloque defendió su zona de influencia frente al avance del bloque contrario. Washington y Moscú utilizaron diferentes mecanismos para conseguir estos objetivos. Mientras tanto, los nuevos países que nacían del proceso de descolonización trataron infructuosamente de crear un movimiento que escapara de esta lógica bipolar. El bloque occidental
Estados Unidos, para afianzar el desarrollo de su
política mundial, desplegó una amplia política de
alianzas.
El primer paso en la formación del bloque
soviético fue la creación de la Kominform (Oficina
de Información de los Partidos Comunistas y
Obreros) en 1947. La debilidad económica y política de la mayoría de sus miembros y sus propias divisiones internas impidieron que el movimiento se constituyera en una real alternativa al mundo bipolar de la guerra fría.
|
||||||||||||||
La Coexistencia Pacífica
1955-1962
La muerte de Stalin en
1953 y el ascenso al poder de Jruschov,
el nuevo líder soviético, abrió un nuevo período
en la guerra fría. Tras una fase de grandes
tensiones, un nuevo clima en las relaciones entre
Washington y Moscú hizo que se hablara de
“coexistencia pacífica” y “deshielo”. Sin embargo,
este nuevo ambiente no significó el fin de las
crisis internacionales. En este período se erigió
el Muro
de Berlín y
laguerra
fría se
trasladó al continente americano con la Crisis
de los Misiles en Cuba.
Fue también en estos años cuando, para regocijo
norteamericano, los dos colosos comunistas, China
y la URSS, rompieron su alianza y se convirtieron
en potencias antagónicas.
Jruschov propició
una nueva política exterior que denominó de “coexistencia
pacífica” con
el bloque occidental. Esta búsqueda de la coexistencia no impidió a Jruschovafirmar de forma brutal la hegemonía soviética en los países de su bloque. La intervención militar en Hungría en 1956, que comentamos en extenso en otro tema, fue el mejor ejemplo de esta actitud. Dos factores explican el giro en la política soviética:
Se inició un período que los periodistas
denominaron de “deshielo” en las relaciones
internacionales. Tras muchos años sin encuentro
bilaterales entre los dirigentes de las potencias, Jruschov viajó
a EEUU en 1959 reuniéndose con el presidente
norteamericano Eisenhower y,
posteriormente, celebró una “cumbre” en Viena con Kennedy en
1961.
|
||||||||||||||
Las crisis internacionales:
Berlín, Oriente Medio y Cuba El Muro de Berlín De 1951 a 1958 la República Democrática Alemana (RDA), la Alemania comunista, sufrió una verdadera hemorragia demográfica: más de dos millones de alemanes orientales huyeron a la Alemania Occidental. Las diferencias de nivel de vida y la falta de libertades provocaron este éxodo de población. El 13 de agosto de 1961, ante los ojos atónitos de los berlineses, las autoridades de la RDA iniciaron la construcción de un muro infranqueable que rodearía todo el Berlín occidental. Lo que se denominó en Occidente, el "muro de la vergüenza" se convirtió en el gran símbolo de la guerra fría. El muro de Berlín vino, sin embargo, a estabilizar la situación en la RDA, calmando las inquietudes soviéticas y suprimiendo uno de los mayores focos de tensión internacional. En adelante, Europa dejó de ser el principal escenario de la guerra fría. La crisis de los misiles en Cuba
La toma del poder por Fidel
Castro en
1959, tras derrocar la dictadura pro-americana de
Batista, desencadenó una dura reacción en
Washington. Una de las primeras acciones de Kennedycomo
presidente de EEUU fue el fallido intento de
invasión de Bahía de Cochinos o Playa Girón.
El líder egipcio Nasser nacionalizó
el canal de Suez en 1956. Francia y Gran Bretaña,
principales accionistas y beneficiarias del uso
del canal, reaccionaron mandando tropas al canal.
Israel, inquieta ante el activismo panarabista de Nasser,
intervino en ayuda de las potencias europeas y
ocupó la península egipcia del Sinaí.
La firme actitud norteamericana terminó por
convencer a los líderes europeos para que
ordenaran la retirada de sus tropas. La decadencia
europea en el concierto mundial se hizo evidente.
|
||||||||||||||
La ruptura
chino-soviética
Sin
embargo, bajo una fachada de amistad se desarrolló
una áspera pugna basada en viejas rivalidades
nacionales y en la búsqueda del liderazgo del
mundo comunista.
|
||||||||||||||
Tras asomarse "al borde del abismo" nuclear en Cuba, Kennedy y Jruschov decidieron iniciar de forma más sistemática y duradera una nueva política de distensión. Se abría así un nuevo período de la guerra fría en el que los acuerdos entre las superpotencias no impidieron graves conflictos como el de Vietnam o el Oriente Próximo.
Dos factores explican la nueva actitud de la URSS y EEUU. Por un lado, la crisis de los misiles en Cuba en 1962 hizo tomar conciencia a Moscú y Washington del peligro real de un holocausto nuclear; por otro lado, ambas superpotencias vieron crecer la contestación interna en sus respectivos bloques. La URSS, debilitada por el conflicto chino-soviético, tuvo que hacer frente, entre otros conflictos, a la Primavera de Praga en Checoslovaquia. EEUU vio como la Comunidad Económica Europea y Japón se consolidaban como potencias económicas y como en el seno de la OTAN surgía la disidencia con la Francia de De Gaulle.
Los acuerdos Este-Oeste Tras diversas alternativas, los expertos coincidían en 1971 en que se había llegada a una situación de paridad nuclear. En el vocabulario de los militares, no podía haber vencedores en el caso de una guerra nuclear. La “destrucción mutua asegurada” era cierta y evidente.
En esta situación, los sucesores de Kennedy y Jruschov continuaron la política de distensión. Los presidentes norteamericanos, el demócrata Johnson, que había sucedido a Kennedy tras su asesinato en1963, y el republicano Nixon, y el líder soviético Leonid Breznev, que había relevado a Jruschov en 1964, trataron de aminorar la tensión internacional. Para conseguir este objetivo, se entablaron negociaciones para limitar la carrera armamentística. Estas negociaciones tuvieron resultados parciales pero significativos:
|
||||||||||||||
Hacia
un mundo multipolar
Esta diversificación del poder económico no se
concretó, sin embargo, en un verdadero desafío
político. Sólo la Francia del general De
Gaulle, que había
accedido al status de potencia atómica en 1960,
trató de llevar una política de independencia
respecto a Washington.
Las relaciones Norte-Sur
En los
años sesenta se consolidó la idea de que, junto a
las relaciones Este-Oeste características de la
guerra fría, existían unas relaciones Norte-Sur,
esto es, relaciones entre el Norte desarrollado y
el Sur subdesarrollado o Tercer Mundo.
|
||||||||||||||
Los conflictos en
la era de la distensión
Por otro lado, América Latina quedó también atrapada en la dinámica de la guerra fría. El ejemplo de la Cuba de Castro alentó la extensión de guerrillas revolucionarias por muchos países de la región. La respuesta norteamericana fue apoyar cualquier tipo de gobierno que se enfrentara a la expansión soviética. Entre estos gobiernos hubo odiosas dictaduras militares.
En otro tema desarrollaremos en profundidad el
problema del Oriente Medio.
El presidente Kennedy decidió
la intervención militar norteamericana en favor de
Vietnam del Sur. En 1964, su sucesor, Jonson, se
lanzó a la intervención abierta. Un cuerpo
expedicionario, que en 1967 alcanzó la cifra de
500.000 soldados, se implicó en una guerra en la
que el ejército norteamericano no dudó en utilizar
armas químicas ("agente naranja") y o en llevar a
cabo brutales bombardeos masivos sobre Vietnam del
Norte y las posiciones del Vietcong.
Todos
los esfuerzos norteamericanos fueron baldíos. La
gran ofensiva norvietnamita de 1972 llevó a la
firma de la paz en París, el 23 de enero de 1973.
Vietnam supuso la primera derrota militar de la
historia de EEUU. Esta experiencia llevó a que, en
adelante, los norteamericanos evitaran la
implicación militar directa en los conflictos. Heny
Kissinger, figura clave
de la diplomacia estadounidense durante la
presidencia de Nixon,
fue el principal representante de esta nueva
actitud. |
||||||||||||||
La Nueva Guerra Fría 1975-1985 Las dificultades económicas del mundo occidental tras la “crisis del petróleo” de 1973 y la renuenciaamericana a implicarse militarmente en el exterior tras el fracaso de Vietnam animaron a Moscú a intervenir en diversas zonas del mundo. Fue un espejismo. La debilidad norteamericana era aparente. La soviética era real. El presidente Reagan volvió en los ochenta a una política de enfrentamiento con la Unión Soviética. La URSS no pudo hacer frente al nuevo desafío que venía de Washington. La debilidad económica soviética precipitó el fin de la guerra fría y el posterior derrumbamiento de la URSS.
A mediados de los setenta, EEUU mostraba signos de
debilidad. La crisis económica de 1973 golpeó
duramente la economía de los países capitalistas
desarrollados, el escándalo
Watergate en
1974 forzó la renuncia del presidente Nixon y
la derrota en Vietnam en 1975 extendió la
convicción en la opinión pública norteamericana de
que EEUU debía evitar cualquier intervención
militar en el exterior.
Los avances soviéticos
Envalentonados por estos éxitos, los
soviéticoscometieron un grave error: intervenir
militarmente en Afganistán. La reacción mundial fue inmediata. La ONU y los Países No Alineados condenaron la invasión y EEUU decidió ayudar a las guerrillas islámicas que se enfrentaban a las tropas soviéticas. Se iniciaba una nueva guerra fría.
La respuesta americana al
desafío soviético
Cuando Carter abandonó
la Casa Blanca, derrotado por el republicano Ronald
Reagan, las relaciones
soviético-norteamericanas se hallaban en una
situación de deterioro desconocida desde hacía
muchos años.
En segundo lugar, Reagan anunció
que EEUU iba a utilizar todo tipo de medios,
incluyendo la fuerza militar si fuera necesario,
para socavar cualquier régimen pro-comunista en el
Tercer Mundo.
Los nuevos conflictos
Con el perenne conflicto del Oriente Medio telón
de fondo, el surgimiento en los países musulmanes
del
islamismo radicalmente
antioccidental y antisoviético, fue, sin lugar a
dudas, la gran novedad del paisaje político
mundial en la fase final del siglo XX.
Cuando Saddam
Hussein,
dictador iraquí contrario al islamismo, decidió
atacar a su vecino Irán, las potencias
occidentales y la URSS miraron hacia otro lado e
incluso le apoyaron con armas.
Por unos años el
panorama internacional había mostrado de forma
engañosa un avance de las posiciones soviéticas.
La realidad era mucho menos halagüeña para la URSS.
El estancamiento económico y el inmovilismo
político llevaron el país a una situación en la
que era imposible mantener una política exterior
expansionista.
La situación en Moscú se hacia insostenible. Así, el 11 de marzo de 1985, Mijaíl Gorbachov, de "solo" 54 años, fue elegido Secretario General del PCUS. El nuevo líder soviético se aprestó a iniciar un proceso de reformas profundas en el país. Nadie podía predecir la magnitud del proceso de cambios que iba a desencadenar.
Para Gorbachov,
la profundidad de la crisis económica y social de
la URSS hacía imposible mantener la ficción de una
paridad entre las dos superpotencias. Para sacar
al país de la crisis era absolutamente necesario
reducir los gastos militares y recortar los
ingentes recursos empleados en mantener el
“imperio soviético”. |
||||||||||||||