El marxismo es el conjunto de
doctrinas políticas y
filosóficas derivadas de la
obra de Karl Marx, filósofo,
economista, periodista y
revolucionario del siglo XIX y
de su amigo Friedrich Engels.
Marx y Engels se basaron en la
filosofía de Hegel y de
Feuerbach, ambos alemanes, la
economía política de Adam
Smith, la economía ricardiana
y el socialismo francés del
siglo XIX para desarrollar una
crítica de la sociedad que es
tanto científica como
revolucionaria. Esta crítica
alcanzó su expresión más
sistemática en su obra más
importante, El capital:
crítica de la economía
política. Además de las raíces
mencionadas, algunos
pensadores marxistas del siglo
XX, como Louis Althusser, Toni
Negri o Miguel Abensour han
señalado en la obra de Marx,
el desarrollo de temas
presentes en la obra de
Maquiavelo o Spinoza.
Hegel
propuso una forma de idealismo en el que las ideas se
desarrollaron gradualmente en la historia. Marx conservó el
énfasis histórico de Hegel, pero propuso una tesis,
contraria a la de Hegel, de que es el desarrollo de la
producción, de sus fuerzas productivas y relaciones de
producción son las que determinan el curso de la historia,
la base de su desarrollo; y que las ideas se alzan sobre
esta base, y no a la inversa. Marx resume su teoría
filosófica materialista de la historia, en el materialismo
histórico, en Contribución a la crítica de la economía
política: "En la producción social de su existencia, los
hombres inevitablemente entablan relaciones definidas que
son independientes de su voluntad, a saber, relaciones de
producción aptas para un estado dado del desarrollo de las
fuerzas materiales de producción. La totalidad de estas
relaciones de producción constituye la estructura económica
de la sociedad, el fundamento real sobre el que se alza una
superestructura jurídica y política y a la que corresponden
formas definidas de conciencia intelectual. No es la
conciencia de los hombres la que determina su existencia,
sino su existencia social la que determina su conciencia".
Marx recalcó
que el desarrollo de la vida material entrará en conflicto,
y la principal contradicción del sistema capitalista es que
el trabajo es social, pero la forma de apropiación de éste
es privado. Estas contradicciones, son la fuerza motriz de
la historia. Como ejemplo de sus ideas, Marx habló
-principalmente- del desarrollo del capitalismo a partir del
feudalismo y predijo el desarrollo del socialismo a partir
del capitalismo.
Testigo y
víctima de la primera gran crisis del capitalismo (década de
1830 del siglo XIX) y del periodo revolucionario de 1848,
Marx desarrolla una teoría económica capaz de aportar
explicaciones a las mismas, pero a la vez de interpelar a
las clases populares a participar en ella activamente para
producir un cambio revolucionario.
Karl Marx
Friedrich
Engels
Para Marx,
la determinación de la magnitud de valor de una mercancía es
la cantidad de trabajo requerido socialmente para
producirla. Esta es la conocida teoría del valor trabajo.
Así, criticando la teoría de David Ricardo del
valor–trabajo, deduce que el salario es el valor de la
mercancía fuerza de trabajo, y como todo valor, se determina
por el tiempo de trabajo necesario para la producción y
reproducción de la misma, en este caso para la producción y
reproducción de la mercancía fuerza de trabajo, da el valor
de los medios de vida necesarios para asegurar la
subsistencia del trabajador. Por otra parte, el capitalista
comprador de la fuerza de trabajo consume dicha mercancía en
el proceso de producción donde el trabajador rinde durante
un tiempo (jornada laboral) que excede la cantidad de tiempo
necesaria para su reproducción como obrero (salario), es
decir el valor de la fuerza de trabajo y su valorización en
el proceso de trabajo son factores distintos, cuya
diferencia determina la magnitud de la plusvalía (ejemplo de
Marx en el Capital 1: "que para alimentar y mantener en pie
la fuerza de trabajo durante veinticuatro horas haga falta
media jornada de trabajo, no quiere decir, ni mucho menos,
que el obrero no pueda trabajar durante una jornada entera).
Esta plusvalía es apropiada por el capitalista y de ella
procede la ganancia. Esta apropiación constituye la base
fundamental del modo de producción capitalista y a su vez
estas condiciones materiales determinan la superestructura,
es decir las formas y contenidos de la conciencia expresadas
en el arte, la política, la religión y también el derecho.
Esta contradicción fundamental (producción colectiva vs.
apropiación individual) bajo el régimen de producción
capitalista reviste la forma de Ley general de la
acumulación capitalista que consiste en que cuanto mayor es
la riqueza social, es decir el capital en funcionamiento y
por tanto, tanto mayor es la magnitud absoluta del
proletariado y la capacidad productiva del mismo, tanto
mayor es el ejército de reserva, y por tanto a medida que
crece la acumulación de capital crece la acumulación de
miseria, y algunos de sus fenómenos son la disminución de la
tasa de beneficios a la vez que la concentración del capital
en muy pocas manos.
Marx
distingue dos tipos de capitales, el capital variable y el
capital constante. Los medios de producción y las materias
primas utilizadas durante el proceso de producción se
consideran como capital constante debido a que solo
transmiten su valor a la nueva mercancía producida. Sin
embargo, la única mercancía capaz de crear la plusvalía es
la fuerza de trabajo. Así esta se convierte en capital
variable, puesto que gracias a su utilización se genera un
valor que no es pagado por el capitalista.
La tasa de
explotación se calcula gracias a la fórmula Pl/V en donde V
es la cantidad de capital variable utilizado, es decir el
capital invertido en salarios, y Pl la plusvalía obtenida
luego del proceso de producción. También se puede calcular
gracias a trabajo no pagado / trabajo pagado.
Existe
también la composición orgánica del capital C/V que muestra
la sumisión del obrero a los instrumentos de trabajo o
máquinas. En el modo de producción capitalista, esta
composición orgánica tiende a aumentar puesto que el
capitalista substituye progresivamente la mano de obra
demasiado cara por máquinas. En términos anteriores,
reemplaza capital variable por capital constante. Esto se
debe a que los capitalistas entre ellos, al estar en
competencia, tratan de disminuir sus costos para que su
producto tenga el mismo valor que los demás, pero cueste
menos hacerlo. Así buscan aumentar la productividad gracias
al empleo de maquinaria. Sin embargo, esta práctica se
generaliza en todas las empresas del sector, y entonces, al
haber un cambio en la productividad, se genera un cambio en
el valor de la mercancía puesto que ahora cuesta menos
producirla. Hay una tendencia a aumentar la productividad y
a reducir relativamente la cantidad de capital variable
frente al capital constante. Esto genera una baja en el
valor de los productos. Marx esboza así una teoría sobre la
baja tendencial del beneficio ya que como el capital
variable es el único que crea valor, es decir la plusvalía,
y el capital constante solo lo transmite, hay cada vez menos
creación de valor. La tasa de beneficio tiende a cero.
Sin embargo
Marx sugirió que era solo una tendencia ya que los
capitalistas podrían extraer más plusvalía según nuevos
métodos, como la reducción de los precios de los bienes de
consumo gracias al libre comercio, o una nueva organización
del trabajo como lo fue el taylorismo. Así, la contradicción
principal del capitalismo según Marx es el antagonismo de
clases entre la clase capitalista y la clase proletaria.
La necesidad
de la revolución implicada en tales contradicciones está
determinada por las tensiones que se derivan del hecho de
que las fuerzas productivas sobrepasan y se ven limitadas
por las relaciones de producción, para el capitalismo tal
revolución consiste en la «expropiación de los
expropiadores» y movimiento final de la dialéctica de la
propiedad privada y su abolición, que en el pensamiento de
Marx se concreta en un horizonte político concreto: el
socialismo, antesala a su vez del comunismo. El materialismo
dialéctico, es decir la dialéctica del modo en que el hombre
produce sus medios de vida, de la que se deriva su
alienación, constituye para Marx la historia humana (para
Marx: la historia humana es la historia de su alienación y
de la abolición de dicha alienación), historia que a cada
momento solo puede ser entendida según sus diferentes modos
de producción, y la lucha de clases inherente, por ejemplo,
esclavista, feudal, capitalista y comunista.
Las obras de
Marx han influido a un buen número de teóricos y políticos,
en un buen número de ocasiones enemigos entre sí. Por una
parte, habría que señalar la interpretación que han
realizado leninistas, trotskistas y maoístas, partidarios de
que una vanguardia del proletariado se haga con el poder a
través de la fuerza, para así avanzar hacia el socialismo:
URSS, Albania, China, Cuba. Por otra, la que realiza la
socialdemocracia, en sus orígenes contraria a la táctica
revolucionaria y partidaria de avanzar hacia el socialismo a
través de progresivas reformas parlamentarias (hay que decir
que la mayoría de partidos socialdemócratas han ido poco a
poco reformando sus planteamientos, hasta aceptar la
economía de mercado). Asimismo, hay teóricos que se sitúan
entre estas interpretaciones y defienden una revolución
radicalmente democrática (algunos rechazan la idea de
conformar un partido político, por ejemplo), y otros que
aplican el marxismo al estudio de
determinadas ciencias (Historia, Arte, Antropología, etc.).
La economía
política es esencial para esta visión, y Marx se basó en los
economistas políticos más conocidos de su época, los
economistas políticos clásicos británicos, para
ulteriormente criticar su forma errónea de pensar. La
economía política, que es anterior a la división que se hizo
en el siglo XX de las dos disciplinas, trata las relaciones
sociales y las relaciones económicas considerándolas
entrelazadas. Marx siguió a Adam Smith y a David Ricardo al
afirmar que el origen de los ingresos en el capitalismo es
el valor agregado por los trabajadores y no pagado en
salarios. Esta teoría de la explotación la desarrolló en El
capital, investigación “dialéctica” de las formas que
adoptan las relaciones de valor.
El capital
ocupa tres volúmenes, de los cuales sólo el primero estaba
terminado a la muerte de Marx. En este primer volumen, y
particularmente su primer capítulo, se encuentra el núcleo
del análisis. Aquí tiene un peso extraordinario la herencia
de Hegel, y rara vez se lee la obra tan cabalmente como lo
pide Marx en su introducción. El método de presentación
procede de los conceptos más abstractos, incorporando
paulatinamente nuevo estrato sobre nuevo estrato de
determinación y proyectando los efectos de dicho estrato en
un intento por llegar, finalmente, a una explicación total
de las relaciones concretas de la sociedad capitalista
cotidiana. En estas obras Marx demuestra científicamente las
bases de las diferencias entre los seres humanos y sobre la
teoría de la apropiación del trabajo, la "plusvalía", entre
muchas otras cosas.
Marx criticó
a Smith y Ricardo por no reparar en que sus conceptos
económicos reflejaban instituciones específicamente
capitalistas, no propiedades naturales innatas de la
sociedad humana, y no se podían aplicar intactos a todas las
sociedades. La teoría marxista de los ciclos económicos, la
del crecimiento y desarrollo económico, especialmente en dos
modelos sectoriales, y la de la caída en el índice de
rendimiento o teoría de crisis, son otros elementos
importantes de la economía marxista.
La economía política es esencial para
esta visión, y Marx se
basó en los economistas políticos más conocidos de su época,
los economistas políticos clásicos británicos, para
ulteriormente criticar su forma errónea de pensar. La
economía política, que es anterior a la división que se hizo
en el siglo XX de las dos disciplinas, trata las relaciones
sociales y las relaciones económicas considerándolas
entrelazadas. Marx siguió
aAdam
Smith y a David
Ricardo al afirmar que el origen
de los ingresos en el capitalismo es
el valor agregado por los trabajadores y no pagado en
salarios. Esta teoría de la explotación la desarrolló en El
capital, investigación “dialéctica”
de las formas que adoptan las relaciones de valor.
En su labor política y periodística
Marx y Engels comprendieron que el estudio de la economía
era vital para conocer a fondo el devenir social. Fue Marx
quien se dedicó principalmente al estudio de la economía
política una vez que se mudó a Londres.
Marx se basó en los economistas más conocidos de su época,
los británicos, para recuperar de ellos lo que servía para
explicar la realidad económica y para superar críticamente
sus errores.
Vale aclarar que la economía política
de entonces trataba las relaciones sociales y las relaciones
económicas considerándolas entrelazadas. En el siglo
XX esta disciplina se dividió en
dos.
Marx siguió principalmente a Adam
Smith y a David
Ricardo al afirmar que el origen
de la riqueza era el trabajo y el origen de la ganancia
capitalista era el plustrabajo no retribuido a los
trabajadores en sus salarios. Aunque ya había escrito
algunos textos sobre economía política (Trabajo asalariado y
capital1 de
1849, Contribución a la Crítica de la Economía Política1 de
1859, Salario, precio y ganancia1 de
1865) su obra cumbre al respecto es El
Capital.
El capital ocupa tres volúmenes,
de los cuales sólo el primero (cuya primera edición es de
1867) estaba terminado a la muerte de Marx. En este primer
volumen, y particularmente en su primer capítulo
(Transformación de la mercancía en dinero), se encuentra el
núcleo del análisis marxista del modo de producción
capitalista. Marx empieza desde la "célula" de la economía
moderna, la mercancía.
Empieza por describirla como unidad dialéctica de valor
de uso y valor
de cambio. A partir del análisis
del valor de cambio, Marx expone su teoría
del valor, donde encontramos que
el valor de las mercancías depende del tiempo
de trabajo socialmente necesario para
producirlas. El valor de cambio, esto es, la proporción en
que una mercancía se intercambia con otra, no es más que la
forma en que aparece el valor de las mercancías, el tiempo
de trabajo humano abstracto que tienen en común. Luego Marx
nos va guiando a través de las distintas formas de valor,
desde el trueque directo y ocasional hasta el comercio
frecuente de mercancías y la determinación de una mercancía
como equivalente de todas las demás (dinero).
Así como un
biólogo utiliza el microscopio para analizar un organismo,
Marx utiliza la abstracción para llegar a la esencia de los
fenómenos y hallar las leyes fundamentales de su movimiento.
Luego desanda ese camino, incorporando paulatinamente nuevo
estrato sobre nuevo estrato de determinación concreta y
proyectando los efectos de dicho estrato en un intento por
llegar, finalmente, a una explicación integral de las
relaciones concretas de la sociedad capitalista cotidiana.
En el estilo y la redacción tiene un peso extraordinario la
herencia de Hegel.
La crítica de Marx a Smith, Ricardo y
el resto de los economistas burgueses residen en que su
análisis económico es ahistórico (y por lo tanto,
necesariamente idealista), puesto que toman a la mercancía,
el dinero,
el comercio y
el capital como
propiedades naturales innatas de la sociedad humana, y no
como relaciones sociales productos de un devenir histórico
y, por lo tanto, transitorias. Junto con la teoría del
valor, la ley
general de la acumulación capitalista,
y la ley
de la baja tendencial de la tasa de ganancia,
son otros elementos importantes de la economía
marxista.
Los
marxistas consideran que la sociedad capitalista se divide
en clases sociales, de las que toman en consideración
principalmente dos:
la
clase trabajadora o proletariado: Marx definió a esta
clase como «los individuos que venden su mano de obra y no
poseen los medios de producción», a quienes consideraba
responsables de crear la riqueza de una sociedad
(edificios, puentes y mobiliario, por ejemplo, son
construidos físicamente por miembros de esta clase;
también los servicios son prestados por asalariados). El
proletariado puede dividirse, a su vez, en proletariado
ordinario y lumpen-proletariado, los que viven en pobreza
extrema y no pueden hallar trabajo lícito con regularidad.
Éstos pueden ser prostitutas, mendigos o indigentes.
la
burguesía: quienes «poseen los medios de producción» y
emplean al proletariado. La burguesía puede dividirse, a
su vez, en la burguesía muy rica y la pequeña burguesía:
quienes emplean la mano de obra, pero que también
trabajan. Éstos pueden ser pequeños propietarios,
campesinos terratenientes o comerciantes.
Marx
desarrolló estas ideas para apoyar su defensa del socialismo
y el comunismo. «Los filósofos solamente han interpretado el
mundo de diferentes maneras; de lo que se trata es de
cambiarlo.» (Tesis XI sobre Feuerbach). El comunismo sería
una forma social en la que este sistema habría terminado y
las clases trabajadoras serían las únicas beneficiarias de
los «frutos de su trabajo».
Algunas de
estas ideas las compartieron los anarquistas, aunque
difirieron en sus creencias respecto al modo de acabar con
la sociedad de clases. Los pensadores socialistas opinaron
que la clase trabajadora debía apropiarse del Estado
capitalista existente y convertirlo en un Estado
revolucionario obrero que implantaría las estructuras
democráticas necesarias para luego marchitarse. En el bando
anarquista, gente como Mijaíl Bakunin y Piotr Kropotkin
afirmaron que el Estado o cualquier forma de autoridad y
centralización de poder, per se, era el problema
(político-económico), y que destruir esto debía ser el
objetivo de toda actividad revolucionaria.
Muchos
gobiernos, partidos políticos, movimientos sociales y
teóricos académicos han afirmado fundamentarse en principios
marxistas. Ejemplos particularmente importantes son los
movimientos socialdemócratas de la Europa del siglo XX, la
Unión Soviética y otros países del bloque oriental, Mao y
otros revolucionarios en países agrarios en desarrollo.
Estas luchas han agregado nuevas ideas a Marx y, por lo
demás, han transmutado tanto el marxismo que resulta difícil
especificar el núcleo de éste.
Actualmente
las transformaciones socio-económicas han obligado a
repensar al marxismo en una línea llamada posmarxismo en la
cual se encuentran autores como Ernesto Laclau y Chantal
Mouffe.
Se
acostumbra hablar de teoría marxista cuando se hace
referencia a la aplicación de planteamientos marxistas a
diversas cuestiones no estrictamente económicas o políticas,
como la religión, el arte, la relación entre sexos o razas,
etc., sin necesidad de asumir la totalidad de las ideas
marxistas.
El marxismo
ha sido tradicionalmente opuesto a todas las religiones.
Marx escribió al respecto que la religión es el opio del
pueblo. La fundamentación filosófica del rechazo de la
religión ha sido desarrollada por el materialismo dialéctico
de autores como Engels y Lenin.
La miseria
religiosa es,
por una parte la expresión de la miseria real y,
por la otra, la protesta contra la miseria real.
La religión es el suspiro de la criatura oprimida,
el corazón de un mundo sin corazón,
así como es el espíritu de una situación carente de
espíritu.
Es el opio del pueblo
La referencia al opio ha
prestado a una interpretación vulgar ya que éste no es -como
suele suponerse- un estupefaciente ni tampoco un
alucinógeno, sino un narcótico analgésico. Este equívoco del
lector contemporáneo ha derivado en una confusión frecuente
respecto de la sentencia marxista. La cita completa revela
el por qué de la referencia a un opiáceo: jamás pretende que
la religión se considere una forma de degradación
intelectual ni tampoco una mera ilusión generada por las
clases dominantes (interpretación no marxista que suprimiría
la idea que éste tenía de la ideología, esto es, la ilusión
de universalidad dentro de cada clase), sino que la religión
sea, por el contrario, el anestésico necesario de la
sociedad entera frente a la alienación social y de las
clases oprimidas frente a sus condiciones materiales de
existencia.
En Marx, la crítica de la religión no
es una defensa del ateísmo,
sino la crítica de la sociedad que hace necesaria a la
religión. La supresión de estas condiciones y la realización
plena de la comunión humana se desvincula de la condición
biológica, proyectándose "al cielo" como intervención divina
en una parusía futura,
particularmente en el especial caso del cristianismo,3 en
vez de construirse políticamente mediante la abolición de la
propiedad privada y la división del trabajo. El fundamento
filosófico del rechazo marxista de la religión ha estado
vinculado al desarrollo del materialismo
dialéctico por parte de Engels y
Lenin.
En cualquier caso, ha habido diversos
teóricos que consideran que ser marxista y religioso es
compatible. Dentro de ellos se puede señalar al irlandés James
Connolly y a diversos autores
dentro de la teología
de la liberación como Camilo
Torres y Leonardo
Boff. Pero la crítica teórica
hacia cualquier religión se basa en que ésta es concebida
como el resultado de la producción de la superestructura de
la sociedad, es decir, de la fabricación de
ideas ideológicas que se hace una sociedad sobre sus propios
modos de producción económicos. Así, la religión siempre es
una concepción de ideas políticas que tienden a reafirmar la
estructura económica existente. Los textos marxistas donde
se puede encontrar información sobre la concepción marxista
de la religión son:
La
ideología alemana de Marx y Engels, y La filosofía como arma
de la revolución de Louis Althusser.
Marx
describe a la religión como un ente alienador, el cual le
pone como meta alcanzar a Dios, situación imposible para un
humano pues Dios es la esencia humana deificada, es decir:
la humanidad le ha dado sus mejores características a Dios.
La religión haría conformista al hombre y lo obligaría a no
luchar en este mundo, pues este es solo un preludio del
verdadero. La síntesis cristiano-marxista de los teólogos de
la liberación replica que el marxismo no implica este aserto
y que, de ser así, también las clases dominantes impregnadas
de espíritu religioso serían conformistas respecto de su
existencia material e incluso serían pasivas frente a un
conflicto con otras clases sociales.
Para estos, en cambio, la religión -y
en particular la cristiana- siempre exige una lucha en este
mundo en función de una comunidad religiosa: sea con o sin
clases dependiendo de cómo se la entienda políticamente.
Debe recordarse que para el catolicismo la
resurrección es el regreso al edén en la tierra y que,
aunque dependa de Dios, ningún esfuerzo individual tendría
sentido si estuviera coronado por una muerte sin retorno
(incluso si la realización plena de la humanidad pudiera
hacerse sólo socialmente y no biológicamente como en la
resurrección cristiana), ya que la salvación de cada hombre
de acuerdo a su esfuerzo dentro del alienado mundo presente
sólo puede ser asegurado con la eternidad y la participación
en el mundo venidero.
Esto es igualmente cierto tanto para
el ideario de autorrealización personal de la derecha
cristiana (calvinista o
al menos reconciliada con la burguesía), como para la lucha
de clases de la izquierda cristiana (marxista o no), como
para las originarias posiciones ascéticas y
apolíticas del cristianismo
primitivo. Estas últimas en
particular dieron forma estamental a
la dicotomía interna entre la vida económica y la religiosa
del occidente
medieval extramundano y a su
peculiaridad histórica de fusión entre "sociedad civil" y
"sociedad política" descrita con atención por Marx en su
obra
Sobre la cuestión judía, cuya
visión llegaría, junto con la opuesta de Nietzsche,
a Max
Weber, y que entroncaría en el
debate marxista-weberiano sobre la influencia económica de
la religión.
En su
versión más ortodoxa, la interpretación marxista de la
religión sería la de una forma de alienación cuya
consecuencia para el hombre sería perder sus virtudes para
adjudicárselas a un inventado ser supremo.
Según Karl
Marx, esto es lo que ocurriría en particular con la religión
monoteísta: el hombre toma toda virtud que posee y toda
idealización metafísica posible, y se la atañe a un ser
supremo de su propia creación, devaluándose a sí mismo y
dedicando su ser y propio destino a su voluntad y una
trascendencia irreal posibilitada por su existencia.
Marx
resumió la génesis de su concepción materialista de la
historia en Contribución a la crítica de la economía
política (1859):
El primer trabajo emprendido para
resolver las dudas que me azotaban, fue una
revisión crítica de la filosofía hegeliana del
derecho, trabajo cuya introducción apareció en
1844 en los “Anales francoalemanes”, que se
publicaban en París. Mi investigación me llevó a
la conclusión de que, tanto las relaciones
jurídicas como las formas de Estado no pueden
comprenderse por sí mismas ni por la llamada
evolución general del espíritu humano, sino que,
por el contrario, radican en las condiciones
materiales de vida cuyo conjunto resume Hegel
siguiendo el precedente de los ingleses y
franceses del siglo XVIII, bajo el nombre de
“sociedad civil”, y que la anatomía de la sociedad
civil hay que buscarla en la economía política.
En
Bruselas a donde me trasladé a consecuencia de una
orden de destierro dictada por el señor Guizot
proseguí mis estudios de economía política
comenzados en París. El resultado general al que
llegué y que una vez obtenido sirvió de hilo
conductor a mis estudios puede resumirse así:en
la producción social de su vida los hombres
establecen determinadas relaciones necesarias e
independientes de su voluntad, relaciones de
producción que corresponden a una fase determinada
de desarrollo de sus fuerzas productivas
materiales.
El
conjunto de estas relaciones de producción forma
la estructura económica de la sociedad, la base
real sobre la que se levanta la superestructura
jurídica y política y a la que corresponden
determinadas formas de conciencia social. El modo
de producción de la vida material condiciona el
proceso de la vida social política y espiritual en
general. No es la conciencia del hombre la que
determina su ser sino, por el contrario, el ser
social es lo que determina su conciencia.
Al llegar a una fase determinada de desarrollo
las fuerzas productivas materiales de la sociedad
entran en contradicción con las relaciones de
producción existentes o, lo que no es más que la
expresión jurídica de esto, con las relaciones de
propiedad dentro de las cuales se han desenvuelto
hasta allí. De formas de desarrollo de las fuerzas
productivas, estas relaciones se convierten en
trabas suyas, y se abre así una época de
revolución social.
Al
cambiar la base económica se transforma -más o
menos rápidamente- toda la inmensa superestructura
erigida sobre ella. Cuando se estudian esas
transformaciones hay que distinguir siempre entre
los cambios materiales ocurridos en las
condiciones económicas de producción y que pueden
apreciarse con la exactitud propia de las ciencias
naturales, y las formas jurídicas, políticas,
religiosas, artísticas o filosóficas, en una
palabra las formas ideológicas en que los hombres
adquieren conciencia de este conflicto y luchan
por resolverlo. Y del mismo modo que no podemos
juzgar a un individuo por lo que él piensa de sí,
no podemos juzgar tampoco a estas épocas de
transformación por su conciencia, sino que, por el
contrario, hay que explicarse esta conciencia por
las contradicciones de la vida material, por el
conflicto existente entre las fuerzas productivas
sociales y las relaciones de producción
Ninguna formación social desaparece antes de que
se desarrollen todas las fuerzas productivas que
caben dentro de ella, y jamás aparecen nuevas y
más elevadas relaciones de producción antes de que
las condiciones materiales para su existencia
hayan madurado dentro de la propia sociedad
antigua. Por eso, la humanidad se propone siempre
únicamente los objetivos que puede alcanzar,
porque, mirando mejor, se encontrará siempre que
estos objetivos sólo surgen cuando ya se dan o,
por lo menos, se están gestando, las condiciones
materiales para su realización. A grandes rasgos,
podemos designar como otras tantas épocas de
progreso en la formación económica de la sociedad
el modo de producción asiático, el antiguo, el
feudal y el moderno burgués.
Las
relaciones burguesas de producción son la última
forma antagónica del proceso social de producción;
antagónica, no en el sentido de un antagonismo
individual, sino de un antagonismo que proviene de
las condiciones social de vida de los individuos.
Pero las fuerzas productivas que se desarrollan en
la sociedad burguesa brindan, al mismo tiempo, las
condiciones materiales para la solución de este
antagonismo. Con esta formación social se cierra,
por lo tanto, la prehistoria de la sociedad
humana.
Acumulación:
Reinversión del plusvalor en el proceso
productivo y
aumentode
la escala de
producción.
Se caracteriza por la centralización de los
capitales y la concentración del plusvalor. La
acumulación es una reproducción ampliada del
capital
.
Alienación
[= enajenación]: Proceso histórico-social en
el cual el producto del trabajo humano se
independiza, se vuelve autónomo, escapa al
control racional y termina siendo hostil
contra su creador. AunqueMarxlos
utiliza como sinónimos, etimológicamente
“alienación” tiene un origen psicológico y
“enajenación” económico. Hegel define
“alienación” como “otro distinto de sí mismo”.
En Hegel su contenido no es negativo. En Marx,
sí. Además de una pérdida, expresa el
desgarramiento, la escisión y la fragmentación
del ser humano. Algo está alienado o enajenado
cuando ya no nos pertenece.
Bonapartismo:
Categoría política empleada porMarxa
partir del ejemplo histórico de Luis
Bonaparte, quien encabezó un golpe de Estadoen
Francia en 1851. Hace referencia a un tipode
liderazgo político que aparenta ser
“equidistante” en la lucha de clases. Es una
forma de dominación política donde el
ejército, la burocracia y el Estado —durante
una crisis aguda— se independizan parcialmente
de la burguesía. Ésta se separa de los
partidos políticos tradicionales y pasa a ser
representada por el ejército o por algún
liderazgo carismático. Para Marxtiene
un contenido negativo.
Burguesía:
Clase social que agrupa inicialmente a
mercaderes y banqueros, más tarde a
capitalistas industriales. Nace en Europa
occidental en el siglo XI y desde allí
comienza a expandirse. Alcanza su predominio
económico a partir de la revolución industrial
en Inglaterra y su completa dominación
política desde la revolución francesa de 1789
en adelante.
Burocracia:
En el capitalismo, es una forma de dominación
política donde predominan los funcionarios.
Aparenta ser instrumental y neutral pero tiene
siempre un contenido político reaccionario.
Ejerce su poder tanto en el Estado como en las
empresas privadas. En las revoluciones
socialistas y proletarias que se
burocratizaron (durante el sigo XX), se
convierte en una casta represiva y
privilegiada que oprime a la clase
trabajadora.
Capital:
No es una cosa eterna ni un “factor
económico”. No siempre existió: es histórico.
Es una relación social de producción. Es valor
que se valoriza (se acrecienta) explotando
trabajo ajeno. Es dinero que se independiza,
cobra vida y se vuelve un sujeto autónomo,
ejerciendo su poder de mando sobre los
trabajadores. Es trabajo muerto y pretérito
que vuelve a la vida oprimiendo al trabajo
vivo de la clase obrera. Es un vampiro que se
alimenta de plusvalor.
Capitalismo:
Sistema social de explotación y dominación.
Tiene alcance mundial. Está en permanente
expansión. Vive conquistando territorios
sociales y geográficos. Recorre diversas fases
históricas.
Clases
sociales: Grandes conjuntos de seres humanos
que comparten un mismo modo de vida y una
misma condición de existencia. Se diferencian,
se enfrentan entre sí, construyen su propia
identidad social y se definen tanto por su
posesión o no posesión de los
mediosde
producción como por sus intereses, su cultura
política, su experiencia de lucha, sus
tradiciones y su conciencia de clase (de sí
mismos y de sus enemigos). Las clases
explotadoras viven a costillas de las
explotadas, las dominan y las oprimen, por eso
están en lucha y conflicto permanente a lo
largo de la historia.
Colonialismo:
Fase histórica del capitalismo donde las
grandes metrópolis conquistan territorios que
denominan colonias. El neocolonialismo
mantiene ese dominio, aceptando solamente la
independencia formal de las colonias.
Comunismo:
Corriente política revolucionaria que aspira a
transformar todo el mundo.Marxno
la inventa. En la década de 1840 —cuando él la
conoce— evocaba la idea de la commune, unidad
de gobierno autónomo. Sugería la noción de
communauté, propiedad común de las cosas. Como
entonces se llamaba “socialismo” a las teorías
de los intelectuales y “comunismo” a los
grupos de obreros revolucionarios, Marxy
Engels adoptaron este último. En tanto
movimiento político, para Marxel
comunismo es una corriente que intenta
defender el punto de vista crítico radical de
los trabajadores contra el capitalismo. Como
proyecto de nueva sociedad,Marxlo
define como una forma social sin explotación
ni dominación, donde los productores
libremente asociados —sin la violencia del
Estado— deciden qué, cómo, cuánto y para qué
producir y consumir. Según Marx,
en la sociedad comunista del futuro, cada
individuo será complemente libre y deberá
entregar a la sociedad todo lo que sus
capacidades le permitan. A cambio obtendrá
todo lo que necesite.
Concepciones
del mundo: No existe una, sino muchas.
Constituyen visiones integrales del ser
humano, que presuponen un punto de vista totalizante sobre la sociedad, la historia y
el sentido de la vida. Cada una forma un
conjunto articulado, sistemático, crítico y
coherente de ideas,conceptos,
valores y normas de conducta práctica que nos
guían en nuestra vida cotidiana.
Concepción
materialista de la historia: Nueva concepción
inaugurada porMarxy
Engels. Base de la necesaria y aún pendiente (re)unificación
de todas las ciencias sociales. Su idea
central es que toda la historia no es más que
la historia de la lucha de clases. No hay
evolución automática. La clave de la historia
está en el conflicto, en las rebeliones y en
las revoluciones. Para diferenciar una época
de otra, hay que atender al tipo de relaciones
sociales que predomina en cada período. El
“materialismo” de esta concepción remite a la
centralidad de las relaciones sociales, por
contraposición al “Espíritu universal” de la
filosofía de la historia de Hegel. Para Marx,
no hay instituciones eternas. Todas son
históricas. La sociedad constituye una
totalidad de relaciones de producción y
reproducción, materiales e ideológicas. En
tanto totalidad, la sociedad no una sumatoria
mecánica de parcelas sueltas o factores
yuxtapuestos: el “factor” económico, el
“factor” político y el “factor” ideológico. La
teoría de “los factores” es ajena almarxismo.
Conciencia
de clase: Identidad cultural y comprensión
política, pensada, vivida y sentida por cada
grupo social sobre sus intereses a largo
plazo. No se adquiere ni se logra por decreto,
sino a partir de experiencias históricas,
tradiciones y luchas políticas. Nunca está
dada. Jamás preexiste. Se va construyendo a
partir de los conflictos. La mayoría de las
veces se genera a saltos. Cuando se logra, la
clase trabajadora puede pasar de la necesidad
económica a la voluntad política. La
conciencia de clase es parte beligerante en la
lucha de clases. Empezar a construirla es
comenzar a ganar la lucha.
Contradicción:
Categoría fundamental de la lógica dialéctica.
Su extremo opuesto es la identidad. Algo es
idéntico cuando no puede distinguirse una
diferencia. Si existen distinciones, la
identidad se transforma en diferencia. Si la
diferencia se profundiza, hay contrariedad y
contraposición. Si la oposición se agudiza, la
contrariedad se transforma en contradicción.
En ese caso, los polos opuestos ya no son sólo
diferentes sino contradictorios y antagónicos
(no pueden conciliarse). Ejemplos: la relación
social de “capital” encierra la contradicción
antagónica entre empresarios y trabajadores.
La crisis del capitalismo constituye la
explosión de múltiples contradicciones
antagónicas. El cambio y el movimiento de la
historia son producto de esas contradicciones.
Crisis
orgánica: Crisis estructural de largo aliento
—distinta de cualquier crisis de coyuntura—.
Combinación explosiva de la crisis económica y
la crisis política. Debilitamiento de todo un
régimen político. Pérdida de consenso y de
autoridad en la población del conjunto de la
clase dominante y sus instituciones políticas.
Determinismo:
Corriente de pensamiento que asigna a las
regularidades de la sociedad un carácter
ineluctable, necesario y apodíctico. Tiende a
asimilar las leyes históricas con las leyes
naturales. Interpreta las leyes que estudia El
Capital —leyes de tendencia— como si fueran
“leyes de hierro”, que se cumplen sí o sí,
independientemente de la lucha de clases.
Dialéctica:
El pensamiento dialéctico está presente en
diversas culturas (China, India, Persia, Mesopotamia, Egipto, Aztecas, Mayas, Incas,
etc.) desde los orígenes de la humanidad. En
Grecia nace con el filósofo Heráclito de Éfeso
[540-480 a.C.]. Para él, el universo está en
permanente contradicción y devenir. SegúnMarx,
la dialéctica plantea la unidad inseparable
entre la realidad objetiva y el sujeto que
piensa y actúa sobre esa realidad. No se
pueden escindir la teoría de la práctica, el
decir del hacer, la realidad del pensamiento,
ni el conocimiento de la acción. La dialéctica
deMarxes
crítica y revolucionaria porque considera y
aborda toda realidad como histórica y
perecedera. No se arrodilla ante ninguna
institución ni le teme al antagonismo de la
contradicción.
Dinero:
No es una cosa ni un objeto “mágico”.
Constituye una relación social de producción.
Representa el equivalente general en el cual
se refleja el mundo entero de las mercancías.
Como equivalente, el dinero se independiza de
la relación social de valor y se vuelve
autónomo. Se convierte en un sujeto dotado de
vida propia. Se transforma en un fetiche. Su
poder no es más que el poder social de las
clases poseedoras. Siguiendo a W.Shakespeare,Marxlo
define como “la puta universal” porque el
dinero no reconoce diferencias. Todo le da lo
mismo.
Dogmatismo:
Culto ciego a la obediencia. Cerrazón.
Negación de todo pensamiento crítico.
Canonización de un texto como si fuera
“sagrado”. El dogmatismo le ha hecho un daño
enorme al
marxismo.
Dominación:
Proceso de sujeción y subordinación de una
clase social sobre otra que se ejerce
colectivamente y también en el terreno de la
subjetividad. La dominación presupone
relaciones de poder y explotación, de
imposición de la voluntad del opresor sobre
los pueblos oprimidos, las clases explotadas y
las masas sojuzgadas.
Ecologismo:
Corriente político-ideológica que cuestiona
las bases de sustentación de la moderna
sociedad industrial, el agotamiento de sus
fuentes energéticas, la destrucción
sistemática del medio ambiente y la
irracionalidad de una relación con la
naturaleza concebida como puramente
instrumental. Como movimiento social es muy
heterogéneo. Elmarxismohace
suyos los reclamos ecologistas, integrándolos
en una perspectiva crítica mayor. Sólo se
podrá lograr una nueva manera de vincularse
con la naturaleza cuando se ponga fin
—mediante una revolución mundial— a la lógica
del lucro, el valor, la ganancia y la
acumulación capitalista.
Economicismo: Corriente
política que reduce la lucha popular
únicamente al reclamo por reformas económicas
y reivindicaciones mínimas. Desprecio de todo
debate teórico e ideológico. Sospecha a priori
sobre toda actividad intelectual. Reducción
delmarxismoa
una vulgar teoría que todo lo reduce al
“factor económico”. El economicismo ha hecho
estragos en la tradición marxista.
Estado:
No existe una única definición. Para el
liberalismo burgués es “la nación
jurídicamente organizada”. Sin distinciones de
clases, nos representaría “a todos por igual”.
Para elmarxismoes
la cristalización institucional de
determinadas relaciones sociales de fuerza:
por eso defiende a unos contra otros y tiene
un contenido de clase. El ejercicio permanente
del poder del Estado (más allá de quien sea el
presidente y cuál partido esté en el gobierno)
tiene un contenido de clase que se lo otorga
el sector social que tiene el poder. No está
sujeto a elección, no se vota. La única manera
de cambiar el contenido de clase de un Estado
es mediante una revolución. El poder del
Estado viene acompañado de instituciones
hegemónicas.
Eurocentrismo:
Ideología que ubica en la historia y la
cultura europeo occidental el ombligo absoluto
del mundo. Cualquier desarrollo social o
cultural distinto o coexistente al de Europa
occidental —y al de su hijo predilecto, los
Estados Unidos de Norteamérica— es catalogado
por esta ideología como “barbarie”. El
eurocentrismo ha infringido un gran daño a la
tradición marxista.
Evolucionismo
(etapismo):
En su significado marxista (distinto al de
Charles Darwin), hace referencia a una
concepción de la sociedad que postula la
férrea sucesión evolutiva de rígidas etapas,
sin saltarse ninguna. También se lo conoce
como etapismo. El evolucionismo suele estar
asociado a la idea de “progreso”. El
desarrollo social es concebido como lineal,
moviéndose siempre de lo peor a lo mejor y en
una sola dirección. La concepción histórica deMarxno
es evolucionista ni etapista.
Explotación:
Dominación de una clase social sobre otra a
partir de la apropiación del trabajo impago,
del tiempo de trabajo excedente y del plusvalor. En el capitalismo, aunque la clase
trabajadora logre salarios “altos”, sigue
siendo explotada.
Feminismo:
Corriente político-ideológica que cuestiona
radicalmente la dominación de la sociedad
patriarcal, el machismo, la escisión entre lo
público y lo privado y la construcción
histórica de la subjetividad que fija “roles”
preestablecidos según los géneros. Como
movimiento social resulta sumamente
heterogéneo. Las vertientes feministas
marxistas abordan al mismo tiempo la
dominación patriarcal y la opresión de la
clase trabajadora, sin confundir pero tampoco
sin escindir el género y la clase.
Fetichismo:
Proceso derivado de las relaciones sociales
mercantiles capitalistas. Se genera a partir
de la sociabilidad indirecta del trabajo
humano cuando éste se produce en condiciones
de mercado. Si hay fetichismo no hay control
racional de la producción ni planificación. El
fetichismo genera la personificación de las
cosas —vueltas autónomas y hostiles contra sus
creadores— y la cosificación de los seres
humanos.
Filosofía:
Disciplina milenaria que se caracteriza por
formular preguntas críticas y radicales acerca
del sentido de la vida, el ser humano, la
sociedad, la historia y el papel del sujeto en
ella.Marxproduce
en el seno de esta disciplina una revolución
al reclamarle que rompa el círculo vicioso de
su discurso para ir más allá de sí misma:
hacia la transformación de la sociedad y la
unidad con la clase trabajadora. La vitalidad
de la filosofía que rechaza toda complicidad
con el sistema no está en los pizarrones
académicos sino en la calle y en la lucha de
clases.
Filosofía
clásica alemana: Se inicia con Immanuel Kant
[1724-1804], continúa con Johann Gottlieb
Fichte [1762-1814] y Friedrich Wilhelm Joseph
von Schelling [1775-1854] y culmina con Georg
Wilhelm Friedrich Hegel [1770-1831]. La lógica
dialéctica de Hegel —que concibe todo en
perpetuo devenir y constante contradicción—
constituye la máxima expresión teórica de la
revolución burguesa europea. Sus herederos no
son los tristes profesores de filosofía sino
los trabajadores revolucionarios.
Filosofía
de la praxis: Concepción filosófica deMarxy
de sus continuadores más radicales que intenta
descentrar y superar el punto de vista
contemplativo, tanto del idealismo como del
materialismo. Su clave reside en la actividad
humana transformadora y en la unidad de la
reflexión teórica y la práctica política
radical.
Formación
económico-social: El modo de producción
capitalista nunca se encuentra en forma pura
en la sociedad. Está combinado con diversos
tipos de relaciones sociales. Esa combinación
se denomina “formación económico-social”. Ésta
permite comprender qué posee de específico e
irrepetible cada sociedad y qué tiene de común
y genérico junto con las demás. Este concepto
permite articular lo general y lo particular
del capitalismo, la lógica y la historia, el
género y la especie, lo común y lo
irrepetible.
Fuerza
de trabajo: Es el término con queMarxdesigna
a la capacidad humana de trabajar (para
diferenciarla del “trabajo” a secas). En el
capitalismo es una mercancía muy “especial”.
Es la única que crea valor y que además genera
más valor que lo que ella misma vale.
Fuerzas
productivas: Dimensión de la historia
conformada por los instrumentos tecnológicos
del trabajo, las destrezas laborales y, lo
principal, el sujeto social que ejerce el
trabajo sobre la naturaleza y la sociedad.Marxsiempre
las analiza en unidad con las relaciones
sociales de producción, por eso no constituyen
una variable independiente.
Globalización:
Nueva fase del imperialismo capitalista,
caracterizada por la universalización
productiva, mercantil y financiera, la
revolución tecnológica y la expansión de las
comunicaciones. Hasta ahora estuvo dominada
por el capital. Los trabajadores y la juventud
de todo el mundo luchan por una globalización
de las resistencias anticapitalistas.
Hegemonía:
Proceso de dirección político cultural de un
segmento social sobre otro. Generalización de
los valores culturales propios de una clase
para el conjunto de la sociedad. Hegemonía =
cultura, pero con el agregado de relaciones de
dominación y de poder. La hegemonía burguesa
combina el consenso con los sectores aliados y
la violencia con los enemigos. Los
trabajadores luchan por una contrahegemonía de
carácter socialista.
Historia:
Proceso contingente y abierto, resultado de la
praxis humana. Aunque la historia posee
regularidades —estudiadas por la concepción
materialista de la historia— no tiene un final
cerrado ni una dirección unívoca determinada
de antemano. Su futuro depende del resultado
de la lucha de clases. Podemos ir hacia elsocialismoo
podemos continuar en la barbarie. El marxismointenta
analizar la historia pasada desde “abajo”, no
desde la mirada de los dominadores y
triunfadores, sino desde la rebeldía de los
pueblos sometidos y las clases explotadas.
Humanismo:
Concepción que pone en el eje de sus
reflexiones a los seres humanos (en lugar de
la naturaleza, Dios, el mercado, el dinero o
el capital). Elmarxismoes
heredero de los antiguos humanismos (por
ejemplo el griego o el renacentista, en el
caso europeo). Pero para Marxel
sujeto ya no es el burgués individual sino un
sujeto colectivo: los trabajadores. Marxdiferencia
el humanismo abstracto, que presupone un
individuo ajeno a la historia, del humanismo
revolucionario. Éste tiene por objetivo acabar
con la alineación y liberar al ser humano de
sus productos enajenados a través de la
praxis.
Idealismo:
Antigua corriente filosófica. No tiene nada
que ver con “tener ideales”. El idealismo
afirma que el fundamento último de la realidad
es “la Idea”, “Dios” o “El Espíritu”. En
última instancia, implica una visión
contemplativa del universo.
Ideología:
En elmarxismo“ideología”
tiene dos significados distintos:
concepción
del mundo que implica una determinada
perspectiva de vida ligada a los intereses de
las clases sociales, una escala de valores,
junto con normas de conducta práctica. [2]
Falsa conciencia, obstáculo para el
conocimiento de la verdad, error sistemático,
inversión de la realidad por compromisos con
el poder establecido. El marxismoes
una concepción ideológica del mundo vinculada
a los intereses de los trabajadores
(significado) que cuestiona toda falsa
conciencia ideológica de la burguesía
(significado [2]).
Imperialismo:
Fase del sistema mundial capitalista. Se
caracteriza por la fusión de los capitales
bancarios e industriales, el predominio del
capital financiero, el reparto del mundo en
áreas de influencia, el armamentismo, la
agresividad política de las grandes potencias,
la generalización de los monopolios y la
amenaza de guerra permanente. Recorre diversas
fases históricas. La actual globalización
capitalista es apenas la ultima fase conocida
del imperialismo.
Libertad:
Tiene distintos significados. Para el
liberalismo burgués, ser libre es poseer
propiedad y no encontrar obstáculos o
interferencias para su disfrute. Ser = tener.
“La libertad llega hasta donde llega la
propiedad privada”. ParaMarx,
en cambio, la libertad no puede depender de la
propiedad privada. El ser humano es
auténticamente libre cuando es genuinamente
autónomo, cuando no está forzado a venderse
como una mercancía. El capitalismo anula la
autonomía de las personas para otorgársela al
mercado y a las cosas, transformadas en sujeto
(fetichismo). La verdadera libertad sólo puede
estar más allá de la cosificación, más allá de
la necesidad material, más allá del tener y
más allá del trabajo forzado. En el tiempo
libre, en el ocio creador. SegúnMarx,
el comunismo es un proyecto de sociedad donde
la libertad de todos y todas es condición de
la libertad de cada uno. Nadie puede ser
genuina y auténticamente libre cuando la
mayoría debe venderse en el mercado para
sobrevivir.
Liberalismo:
Corriente ideológica que acompaña el ascenso y
el auge político de la burguesía hasta que
ésta llega al poder. En sus inicios y durante
su apogeo del siglo XVIII europeo, se
caracteriza por combatir la reacción
absolutista, difundir el pensamiento libre,
promover el libre comercio y las libertades
públicas. Cambia radicalmente cuando la
burguesía llega al poder y entran en escena la
clase obrera y elsocialismo.
Entonces se vuelve reaccionario. Hoy en día,
el neoliberalismo sólo contiene de aquella
ideología la defensa del libre comercio. Pero
se ha tornado absolutamente conservador,
partidario de gobiernos despóticos, opositor a
todo pensamiento libre y enemigo de las
libertades públicas. Por eso promueve el
control y la vigilancia permanente de los
individuos.
Lucha
de clases: No es un enfrentamiento entre
individuos aislados (por enemistades o
envidias personales). Es un conflicto
histórico entre grandes conjuntos de personas:
las clases sociales. Esta confrontación divide
a la sociedad en opresores y oprimidos:
esclavistas y esclavos, patricios y plebeyos,
señores feudales y siervos de la gleba,
terratenientes y campesinos, burgueses y
trabajadores. Esta contradicción impulsa el
desarrollo de la historia.
Marxismo-marxiano-marxista:
Elmarxismoes
una teoría crítica de la sociedad capitalista
que promueve en todo el mundo una práctica
política de emancipación, rebeldía,
resistencia, liberación y revolución.
Presupone una concepción del mundo y de la
vida, de la historia y del sujeto, expresada
desde el punto de vista de las oprimidas y los
explotados. Como teoría crítica constituye un
saber abierto. Es científica, filosófica,
ideológica, ética y política al mismo tiempo.
El término marxiano es más “técnico”. Hace
referencia a los textos escritos
exclusivamente por Karl
Marx.
El término marxista alude a los escritos, al
pensamiento y a las tradiciones políticas no
sólo deMarxsino
también de sus seguidores y partidarios
posteriores, hasta hoy en día.
Materialismo:
Antigua corriente filosófica. No tiene nada
que ver con el “culto al dinero y a los bienes
terrenales”. El materialismo afirma que el
fundamento último del Universo es “la
Materia”. Uno de los primeros filósofos
materialistas es, en Grecia, Demócrito [460
a.C.-370 a.C.]. Al poner el énfasis en la
realidad objetiva, independiente de la praxis
del sujeto, ajena a la historia y a las
relaciones sociales, el materialismo
filosófico se vuelve especulativo,
contemplativo y pasivo. Separa tajantemente al
objeto del sujeto: se queda sólo con el
objeto, sólo con la materia, sólo con la
naturaleza. El “materialismo” marxiano está
centrado en la historia, la sociedad y los
sujetos. AMarxle
interesa la materialidad… de las relaciones
sociales. La “materia” de la que habla el marxismoes
una materia… estrictamente social y construida
históricamente: las relaciones sociales de
producción. ¡No es la materia físico-química
de las ciencias naturales!. Para la filosofía
marxista de la praxis no hay materia objetiva
sin sujeto, ni sujeto sin materia objetiva.
Mediación:
Categoría fundamental del pensamiento
dialéctico. Expresa el nexo, el vínculo y el
pasaje entre dos momentos del desarrollo y el
movimiento. Al estudiar la sociedad, lo más
difícil es explicar las mediaciones entre la
economía y el poder, entre la acción
reivindicativa y la política, entre los
movimientos sociales y la revolución
socialista. Cuando elmarxismososlaya
las mediaciones se transforma en un vulgar
mecanicismo, donde todo se reduce a un esquema
simplista de “una causa… un efecto”.
Mercancía:
Forma social que adquieren los productos del
trabajo humano en la sociedad mercantil
capitalista. Un objeto es mercancía si además
de tener valor de uso (utilidad) posee valor.
Sólo es mercancía lo que se produce para
vender, no para consumir directamente. En la
mercancía están encerradas las potenciales
contradicciones antagónicas del capitalismo.
Metafísica:
Toda concepción del mundo, puramente
especulativa, desvinculada de la historia y de
la práctica, que se postula como si estuviera
al margen del tiempo y el espacio. En toda
metafísica predomina una interpretación del
mundo, no su transformación. La metafísica se
caracteriza por sus pretensiones de (falsa)
universalidad.
Método:
Conjunto de reglas lógicas que guían el
pensamiento y la práctica.
Método
dialéctico: ParaMarx,
este método plantea la unidad de la
investigación histórica y de la exposición
lógica de los resultados obtenidos, siguiendo
la línea: concreto-abstracto-concreto. El
conocimiento parte de las contradicciones de
la sociedad real. Luego la teoría abstrae,
construye categorías, hipótesis yconceptos,
y finalmente vuelve nuevamente a la sociedad,
para intervenir en sus contradicciones
mediante la praxis. SegúnMarx,
la lógica dialéctica deconceptosy
categorías está estrechamente vinculada a la
historicidad de la sociedad. La lógica
dialéctica de la exposición teórica —El
Capital— expresa y resume a la historia de la
sociedad —el capitalismo—. La clave del método
dialéctico está en concebir la sociedad como
una totalidad y el desarrollo histórico a
partir de las contradicciones.
Modernidad
capitalista: Época histórica atravesada por la
urbanización e industrialización aceleradas,
grandes medios de comunicación, procesos de
secularización religiosa, desacralización de
valores trascendentes, desencantamiento del
mundo y predominio despiadado del valor de
cambio. SegúnMarxtiene
un carácter contradictorio. Por un lado genera
“progreso” y posibilidades de emancipación
individual y colectiva; por el otro barbarie,
vandalismo, conquista, sojuzgamiento,
opresión, genocidio y explotación. El
racionalismo liberal sólo atiende al primer
aspecto. El posmodernismo sólo al segundo. Marxve
ambos.
Modo
de producción: Conjunto articulado de
relaciones sociales de producción. Los
diversos modos de producción permiten periodizar la historia humana. Según la teoría
marxista de la historia, cada uno de ellos
expresa las relaciones sociales en su máxima
pureza y en su concepto esencial. En las
sociedades empíricas y concretas, las
relaciones sociales nunca se dan puras, están
combinadas con relaciones de otros modos de
producción (siempre hay uno que predomina
sobre los demás).
Neoliberalismo:
Fase globalizada del imperialismo capitalista.
Ideología que acompañó la ofensiva capitalista
a nivel mundial desde 1973 —golpe de Estado en
Chile—, pasando por Margaret Thatcher y Ronald
Reagan, hasta 1994 —alzamiento zapatista en
México—. Promueve la libre circulación del
capital, las privatizaciones, el
desmantelamiento de los derechos sociales, la
reducción de los gastos en educación y salud,
la represión a la clase obrera, el
conservadurismo cultural, el machismo, la
xenofobia, la vigilancia y el control
permanente de los individuos, el racismo y la
militarización de todo el planeta. Entra en
una fase de crisis a fines de 1990 a partir de
las rebeliones contra la globalización
capitalista en diversas ciudades del mundo.
Plusvalor
o plusvalía: Fracción del valor producido por
la fuerza de trabajo que es apropiada
gratuitamente por el capitalista. Constituye
el origen de la explotación. Representa un
trabajo impago. Se produce en un tiempo de
trabajo excedente. Es la fuente de vida del
capital. Se divide y reparte entre diferentes
capitalistas: como interés (bancos); ganancias
(industriales) y rentas (terratenientes).
Praxis:
Actividad humana que transforma la sociedad y
la naturaleza transformando, al mismo tiempo,
al sujeto que la ejerce. Ya sea en la
política, en el arte, en la ciencia o en el
trabajo productivo. Como concepto, expresa la
unidad de la teoría y la práctica. Es la
categoría fundamental de la filosofía deMarx.
Producción-mercado-consumo:
La producción es el ámbito donde se generan
las mercancías. Allí se produce la explotación
(“invisible” a la conciencia inmediata). El
mercado es el lugar de la distribución y el
intercambio de mercancías. Es lo más visible
en el capitalismo. El consumo es el espacio
donde las mercancías llegan a los
consumidores. SegúnMarx,
aunque todos estos momentos están
relacionados, el que marca el ritmo del
conjunto es la relación de producción.
Reformismo:
Corriente política que busca parches y
remiendos para el capitalismo, reclamando
reformas y migajas para el trabajador, pero
sin cuestionar al sistema en su conjunto.
Combate los efectos “no deseados” del sistema,
no sus causas. Propone cambios graduales.
Rechaza la confrontación con el poder. Limita
la lucha a lo inmediato y puntual, sin apuntar
a la totalidad.
Relaciones
sociales de producción: Vínculos sociales que
se establecen entre los seres humanos para
producir y reproducir su vida material y
cultural. Los diversos tipos de relaciones de
producción permiten diferenciar una época
histórica de otra. En las sociedades de
clases, toda relación de producción es al
mismo tiempo una relación económica, una
relación de poder y una relación de fuerzas
entre las clases. Las relaciones de producción
capitalista expresan la contradicción
antagónica entre los propietarios de dinero y
los de fuerza de trabajo. No hay conciliación
posible entre ambos.
Reproducción:
Mantenimiento y producción continuada de las
relaciones sociales. Puede ser simple —en la
misma escala— o ampliada. En este último caso,
es sinónimo de acumulación. En el modo de
producción capitalista la reproducción nunca
es automática. Presupone siempre mecanismos
hegemónicos y ejercicio de la fuerza material
(o su amenaza).
República
parlamentaria: Forma específicamente moderna
de dominio político burgués. Cuenta con una
serie de instituciones y mecanismos flexibles
que le permiten ejercer y reproducir un poder
político de clase: las cámaras legislativas,
la autonomía relativa de la burocracia, la
prensa organizada en las grandes urbes, los
partidos políticos de masas, el “libre juego”
entre sindicatos obreros y corporaciones
empresarias, las alianzas y fraccionamientos
políticos, las elecciones periódicas (donde
siempre se elige entre dos caras de la misma
moneda…) etc., etc. SegúnMarx,
es una forma de dominación política anónima e
impersonal, que representa al conjunto de la
burguesía. Por eso resulta mucho más eficaz
para ejercer el dominio sobre los trabajadores
que una dictadura o una monarquía.
Revolución
bolchevique: Primera revolución socialista
triunfante en la historia de la humanidad.
También es conocida como “revolución de
octubre”. Se produjo en 1917. Fue dirigida
principalmente por Lenin, y también por
Trotsky. Antes de que se burocratice, logró
influencia mundial. Marcó a fuego todo el
siglo XX: desde la política hasta el cine y la
pintura. Para frenar y contrarrestar su
influencia en occidente, Henry Ford y John
Maynard Keynes planearon reformas al
capitalismo. Con su revolución, Lenin
consiguió muchas más reformas para los obreros
del mundo que todos los reformistas juntos.
Revoluciones
burguesas: Se producen en el norte de Italia
(siglo XV y XVI). Luego en los Países bajos
(1579), en Inglaterra (1645-1649 y 1688-1689),
EEUU (1776) y Francia (1789). Al generalizar
la ideología del liberalismo, la revolución
francesa se convierte en el paradigma clásico
de revolución burguesa. Ésta separa la Iglesia
del Estado, construye el Estado-nación, el
mercado interno y el Ejército “nacional”
(burgués). Inaugura la dominación política de
la burguesía y el reinado absoluto del dinero
y el valor de cambio.
Revolución
socialista: Se propone crear una sociedad
futura de hombres y mujeres nuevos, liberados
de la explotación económica pero también de la
dominación política de la subjetividad, de la
alienación y el fetichismo mercantil, de la
burocracia, del patriarcalismo, del racismo,
del etnocentrismo y de la xenofobia. Es un
proyecto centralmente político, pero también
ético y cultural.
Sentido
común: Ámbito espontáneo de nuestras opiniones
cotidianas. Es caótico y contradictorio. Nunca
es ajeno a las ideologías. Es un campo de
batalla entre diversas concepciones del mundo
y escalas de valores. Elmarxismoaspira
a reforzar en su seno las opiniones
progresistas y a combatir las reaccionarias.
La filosofía de la praxis intenta superar su
espontaneidad para lograr una concepción del
mundo crítica y coherente.
Sociedad
civil: Tiene muchos significados. En Hegel
hace referencia a las instituciones del
mercado y también a algunas instituciones
políticas, como la policía y la administración
de justicia. EnMarxalude
al conjunto de las relaciones sociales de
producción de la sociedad capitalista. En
Gramsci remite a las instituciones políticas
que no son estrictamente ni económicas (no
pertenecen al mercado) ni estatales (no son
necesariamente parte del Estado): escuela,
universidad, medios de comunicación, partidos
políticos, sindicatos, sociedades de fomento,
iglesias, etc. Estas instituciones tienen por
finalidad generar consenso y construir la
hegemonía. Gramsci también denomina a la
sociedad civil “Estado ampliado”.
Teología
de la liberación: Corriente filosófica y
teológica que intenta fusionar almarxismocon
el cristianismo revolucionario. Aunque
originariamente tuvo ideólogos franceses, la
mayor parte de sus seguidores son
latinoamericanos. Retoma el humanismo de Marx(así
como también del Che Guevara o de Camilo
Torres) y los interpreta desde el mensaje
profético del cristianismo.
Tiempo
de trabajo socialmente necesario: Dimensión
cuantitativa de la teoría del valor. Cantidad
de trabajo abstracto. Constituye la medida
social —no individual— del valor de las
mercancías.
Trabajo:
Proceso de intercambio y mediación entre el
ser humano y la naturaleza, inserto en
relaciones sociales. Cuando es libre,Marxlo
concibe como una actividad vital humana
orientada a un fin que modela según las leyes
de la belleza. Pero en la sociedad capitalista
no es libre, es forzado, está alienado y
enajenado. Se convierte en una tortura y en
una obligación impuesta por la dominación
capitalista. El capitalismo de nuestros días
obliga a una parte de los trabajadores a
desgastar su vida trabajando el doble, y a la
otra, la condena al desempleo, en lugar de
repartir el trabajo entre todos, reduciendo el
trabajo necesario de reproducción y aumentando
el tiempo libre de ocio y disfrute para el
conjunto.
Trabajo
abstracto: Trabajo social global que en la
sociedad capitalista genera valor. Dimensión
cualitativa de la teoría del valor,
estrechamente ligada a la teoría del
fetichismo. Característica que asume el
trabajo humano cuando su sociabilidad es
indirecta y está mediada por el mercado y el
equivalente general. Principal descubrimiento
teórico deMarxen
su crítica de la economía política.
Valor:
No es una cosa ni una propiedad intrínseca de
las cosas. Es una relación social de
producción. En ambos polos de la relación
vincula a poseedores de mercancías. Cuando los
productos del trabajo se generan dentro de
relaciones de valor, se producen para ser
vendidos en el mercado.Marxdistingue
históricamente diversas relaciones de valor.
Desde la más simple (el trueque) hasta la más
desarrollada (el dinero).